Tu situación puede cambiar para bien
Tu situación puede cambiar para bien
“Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.”Génesis 50:20
Al Dios a quien servimos le gusta cambiar por completo situaciones que parecen desesperadas. Tomemos a José por ejemplo. Sus hermanos lo vendieron como esclavo y fue llevado a Egipto, donde obtuvo cierta importancia, pero debido a las acusaciones injustas y falsas de alguien más, pasó años en una cárcel egipcia.
A muchos pudo haberles parecido que Dios se olvidó de José. Rechazado por su familia, esclavizado y encarcelado, ¿qué esperanza podía tener? Para quienes no sabían lo que estaba ocurriendo, la vida de José era improductiva y sin provecho.
Pero Dios miró a José y vio a alguien que a pesar de las pruebas permaneció fiel, honró al Señor y sirvió a otros con devoción piadosa. Y llegado el momento, Dios cambió todo el panorama levantando a José para liderar a Egipto y convertirse en el segundo al mando después de Faraón mismo.
Asimismo, puedes que experimentes situaciones que parezcan desesperadas. Lo más importante que puedes hacer es mantenerte fiel a Jesús, porque al hacerlo invita al Señor a glorificarse en tu vida. Así que no te desanimes, más bien honra a Dios. Él puede cambiar, y cambiará, el entorno en que te encuentras en formas que no puede imaginar, y hará que todas las cosas obren para bien.
Para pensar.
¿Crees que estás enfrentando un proceso injusto ahora en tu vida? Si es así, sigue el ejemplo de José. Míralo como una oportunidad para que Dios trabaje a través de ti, trayéndote bien a ti y a otros, para gloria de Dios. “Sabemos que Dios obra en toda situación para el bien de los que lo aman, los que han sido llamados por Dios de acuerdo a su propósito.” Romanos 8:28 PDT
“Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.”Génesis 50:20
Al Dios a quien servimos le gusta cambiar por completo situaciones que parecen desesperadas. Tomemos a José por ejemplo. Sus hermanos lo vendieron como esclavo y fue llevado a Egipto, donde obtuvo cierta importancia, pero debido a las acusaciones injustas y falsas de alguien más, pasó años en una cárcel egipcia.
A muchos pudo haberles parecido que Dios se olvidó de José. Rechazado por su familia, esclavizado y encarcelado, ¿qué esperanza podía tener? Para quienes no sabían lo que estaba ocurriendo, la vida de José era improductiva y sin provecho.
Pero Dios miró a José y vio a alguien que a pesar de las pruebas permaneció fiel, honró al Señor y sirvió a otros con devoción piadosa. Y llegado el momento, Dios cambió todo el panorama levantando a José para liderar a Egipto y convertirse en el segundo al mando después de Faraón mismo.
Asimismo, puedes que experimentes situaciones que parezcan desesperadas. Lo más importante que puedes hacer es mantenerte fiel a Jesús, porque al hacerlo invita al Señor a glorificarse en tu vida. Así que no te desanimes, más bien honra a Dios. Él puede cambiar, y cambiará, el entorno en que te encuentras en formas que no puede imaginar, y hará que todas las cosas obren para bien.
Para pensar.
¿Crees que estás enfrentando un proceso injusto ahora en tu vida? Si es así, sigue el ejemplo de José. Míralo como una oportunidad para que Dios trabaje a través de ti, trayéndote bien a ti y a otros, para gloria de Dios. “Sabemos que Dios obra en toda situación para el bien de los que lo aman, los que han sido llamados por Dios de acuerdo a su propósito.” Romanos 8:28 PDT
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