Ayuno Dia 18
Dia 18
Tu postura mientras esperas.
pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán. Isaías 40:31
Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá. Miqueas 7:7
¿Creciste con una abuela o una madre que te recordaba a menudo tu postura? Para comer, para tomar los cubiertos, sentarse en la mesa, en un lugar público, como caminar, sentarse recto.
Muchas veces esto resulta incómodo y fastidios para los niños y jóvenes, pero, a esa edad no se entiende qué eso importa tanto. Pero a medida que crecemos, nos damos cuenta de lo importante que es nuestra postura en todo lugar.
La definición de postura es una forma particular de tratar o considerar algo; un enfoque o actitud. Verás, a menudo, tu postura cambia dependiendo de la situación en la que te encuentres en un momento dado. Tu postura es diferente en un restaurante elegante que cuando estás en un estadio animando a tu equipo deportivo favorito o si estás en casa viendo la televisión. Tu postura es a menudo un reflejo de lo que ocurre a tu alrededor, de las circunstancias externas. Sin embargo, cuando se trata de nuestra vida espiritual, necesitamos dejar que nuestra postura sea dictada de adentro hacia afuera.
En las Escrituras, el Señor nunca promete que no nos encontraremos a veces en circunstancias o temporadas difíciles de la vida. Sin embargo, sí promete que Él siempre será fiel, justo, digno de confianza, bueno, que Él tiene el control y que Él es nuestra esperanza.
Cuando se trata de buscar la guianza, provisión, sanidad o sabiduría de Dios a través de la oración en esas circunstancias y temporadas, a menudo habrá un período de espera. La espera puede durar horas, días o incluso años.
Durante la espera, depende de nosotros elegir la postura que tendremos mientras esperamos. ¿Dejaremos que las circunstancias externas dicten nuestra postura que nos llevará a la desesperación, la decepción o el desánimo? ¿O elegiremos una postura de esperanza, ánimo y expectativa conociendo al Dios al que servimos?
En los versículos de hoy, se nos dice que confiemos y esperemos. Cuando vemos "esperar" en estos versículos, no es algo pasivo, sino activo. Esperar en el Señor significa esperar, anticipar y confiar. Cuando elegimos tener una postura de esperanza, anticipación y confianza en Dios sin importar la circunstancia o la petición, Él promete que renovará nuestras fuerzas, nos dará paz y escuchará nuestras oraciones.
Elijamos intencionalmente nuestra postura hoy para alinear nuestro espíritu con la palabra de Dios, Su espíritu, y Su carácter.
Para pensar:
¿Cuál es tu postura mientras esperas?
¿Y qué necesitas hacer para que tu postura sea de esperanza, ánimo y expectativa mientras esperas?
Oración:
Señor, muchas gracias por ser quién eres. Eres un Dios tan bueno, fiel, digno de confianza y tan bondadoso conmigo. Espíritu Santo, ¿me concedes tu paciencia mientras espero en ti? Por favor, lléname de esperanza y expectativa mientras espero, y mantenme alineado con tu espíritu y tu verdad hoy. Mientras miro todas las necesidades a mi alrededor y oro fervientemente, dame una esperanza anticipada en tu poder y presencia. En el poderoso nombre de Jesús.
Tu postura mientras esperas.
pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán. Isaías 40:31
Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá. Miqueas 7:7
¿Creciste con una abuela o una madre que te recordaba a menudo tu postura? Para comer, para tomar los cubiertos, sentarse en la mesa, en un lugar público, como caminar, sentarse recto.
Muchas veces esto resulta incómodo y fastidios para los niños y jóvenes, pero, a esa edad no se entiende qué eso importa tanto. Pero a medida que crecemos, nos damos cuenta de lo importante que es nuestra postura en todo lugar.
La definición de postura es una forma particular de tratar o considerar algo; un enfoque o actitud. Verás, a menudo, tu postura cambia dependiendo de la situación en la que te encuentres en un momento dado. Tu postura es diferente en un restaurante elegante que cuando estás en un estadio animando a tu equipo deportivo favorito o si estás en casa viendo la televisión. Tu postura es a menudo un reflejo de lo que ocurre a tu alrededor, de las circunstancias externas. Sin embargo, cuando se trata de nuestra vida espiritual, necesitamos dejar que nuestra postura sea dictada de adentro hacia afuera.
En las Escrituras, el Señor nunca promete que no nos encontraremos a veces en circunstancias o temporadas difíciles de la vida. Sin embargo, sí promete que Él siempre será fiel, justo, digno de confianza, bueno, que Él tiene el control y que Él es nuestra esperanza.
Cuando se trata de buscar la guianza, provisión, sanidad o sabiduría de Dios a través de la oración en esas circunstancias y temporadas, a menudo habrá un período de espera. La espera puede durar horas, días o incluso años.
Durante la espera, depende de nosotros elegir la postura que tendremos mientras esperamos. ¿Dejaremos que las circunstancias externas dicten nuestra postura que nos llevará a la desesperación, la decepción o el desánimo? ¿O elegiremos una postura de esperanza, ánimo y expectativa conociendo al Dios al que servimos?
En los versículos de hoy, se nos dice que confiemos y esperemos. Cuando vemos "esperar" en estos versículos, no es algo pasivo, sino activo. Esperar en el Señor significa esperar, anticipar y confiar. Cuando elegimos tener una postura de esperanza, anticipación y confianza en Dios sin importar la circunstancia o la petición, Él promete que renovará nuestras fuerzas, nos dará paz y escuchará nuestras oraciones.
Elijamos intencionalmente nuestra postura hoy para alinear nuestro espíritu con la palabra de Dios, Su espíritu, y Su carácter.
Para pensar:
¿Cuál es tu postura mientras esperas?
¿Y qué necesitas hacer para que tu postura sea de esperanza, ánimo y expectativa mientras esperas?
Oración:
Señor, muchas gracias por ser quién eres. Eres un Dios tan bueno, fiel, digno de confianza y tan bondadoso conmigo. Espíritu Santo, ¿me concedes tu paciencia mientras espero en ti? Por favor, lléname de esperanza y expectativa mientras espero, y mantenme alineado con tu espíritu y tu verdad hoy. Mientras miro todas las necesidades a mi alrededor y oro fervientemente, dame una esperanza anticipada en tu poder y presencia. En el poderoso nombre de Jesús.
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